Esto no tiene nada que ver con Colombia… pero sí con tus alumnos
No creo en el horóscopo.
Desde siempre.
Me parece absurdísimo, y me da risa.
Además de parecerme curioso cómo algunas personas rigen su vida por esto… me cuesta tomármelo en serio.
Sobre todo porque recuerdo algo que me contó Leidy, mi mejor amiga de 7mo grado.
Leidy era colombiana, y su familia también.
Los colombianos tienen la fama de ser muy pilas.
No lo niego: they are pilas.
Entonces ella me contó que su papá trabajaba en una revista como escritor, y su sección encargada era la del horóscopo.
Recuerdo haberle preguntado, “¿y tu papá sabe de eso?”
Ella me dijo, “no”.
Acá viene la mejor parte.
Entonces le pregunto, “¿Y entonces? ¿Cómo hace?”
Me dice “pues nada, él se inventa algo que pueda resonar con la mayoría de las personas en cada signo, y listo”.
¿Ves? Son pilas los colombianos.
Pero eso no tiene nada que ver con Colombia.
Tiene que ver con las personas, y la psicología.
Con los sesgos cognitivos.
A ver.
¿Cómo funciona el asunto del horóscopo?
Primero, al tener la revista o lo que sea, sentimos (curiosidad) para ver qué depara el horóscopo para nosotros este mes.
Segundo, las “predicciones” suelen estar escritas con el lenguaje más simple posible, porque lo simple es más fácil de aceptar (Sesgo de fluidez cognitiva).
Tercero, si me hablan de principios universales como el amor, la salud, o vestirse de un color, entonces lo preferiré (Sesgo de familiaridad).
Cuarto, considero que la revista sabe lo que hace. Obvio, de lo contrario no sería una revista publicada. Debe tener profesionales ahí tecleando con sus libros al lado. Además, la revista es una autoridad en los asuntos informativos locales (Sesgo de autoridad).
Por último, si yo, más o menos, tengo ciertas creencias u opiniones, y viene el horóscopo a decirme exactamente lo que yo pienso, como yo lo pienso, entonces eso mismo es (Sesgo de confirmación). Y sé que hay más sesgos.
Ahora que lo pienso… En estos tiempos la deben tener más fácil los del horóscopo con la IA. Qué bien, si antes no trabajaban… ahora estarán en sabático permanente.
En fin.
Cuando creamos activos digitales (infoproductos, formaciones, recursos), NO es un proceso aleatorio.
No hacemos como el papá de Leidy, que nos ponemos a inventar cosas que peguen con la mayoría y que nos vaya bien.
Pero podemos usar la psicología humana ESTRATÉGICAMENTE —no para manipular— para entender, atraer y retener alumnos de manera efectiva.
Piénsalo: al comprender cómo el cerebro procesa la información, qué motiva las decisiones de compra, y cómo se construyen la confianza y el interés, podemos diseñar productos que resuenen profundamente con nuestro público para que maximicen su consumo y aplicación.
Adriana Colombiana 🙂